El pasado 31 de Marzo, sobre el mediodía el Presidente de la República don José Mujica Cordano junto a su esposa Lucía Topolansky, aparecieron sorpresivamente de visita por la Criolla del Parque Roosevelt. Accedió al parque caminando desde Avenida de las Américas, cruzó la avenida principal del Parque recorriendo los stands y como cualquier ciudadano común se sentó en la pizzería que se encuentra en el patio de comidas del predio.
Poco tiempo pasó para no ser advertido por el público, que inmediatamente le comunicó a la Comisión Organizadora de la Criolla del Parque Roosevelt, conformada por el equipo de los Clubes de Leones de Shangrilá y Parque Roosevelt quienes se acercaron de inmediato al lugar para darle la bienvenida y compartir un grato momento junto a él. Posteriormente fue invitado al local de la Administración donde la Comisión Organizadora trabaja y concentra toda su actividad durante la semana. Rápidamente se organizó todo para invitar al Presidente y su señora a compartir un cordero que temprano en la mañana se había comenzado asar y que ni por asomo consideraba que iba a ser parte del menú para el Presidente de los Orientales.
Casualmente y de forma sorpresiva -como todo lo que ocurrió durante estas intensas horas en las que estuvo el Presidente engalanando nuestra Criolla del Parque Roosevelt-, apareció por la Administración "El Payador de América", don Gustavo Guichón, quien nos acompaña desde los orígenes de la organización de esta Criolla del Parque Roosevelt. Uno de los Leones, lo detuvo y le pidió que desenfundara su guitarra. Sin poder mediar palabras y todavía sin creer en su capacidad de asombro, quedó en un mano a mano con el Presidente de la República, a quien le dedicó una muy emotiva payada que seguramente quedará en su memoria por muchísimo tiempo.
Tanto el presidente del Club de Leones Shangrilá, como el Presidente de la Comisión Organizadora de la Criolla del Parque Roosevelt y todo el equipo de trabajo que se encontraba presente en ese momento del día en el Parque Roosevelt, tuvieron la oportunidad de compartir con el Presidente de los Orientales un muy agradable momento, totalmente fuera de protocolo, en un clima muy distendido y sin agenda. Sobre la mesa, estuvieron temas claves y recurrentes para la organización de esta tradicional fiesta, como son la renovación del comodato del Parque Roosevelt, la necesidad de una mayor colaboración de organismos y entes que intervienen en el montaje de toda la infraestructura necesaria para esta tradicional fiesta y la necesidad de transmitir que esta iniciativa llevada cabo año tras año durante 33 años, tiene como finalidad la recaudación de fondos para ser destinados a obras que los Clubes de Leones llevan a cabo en nuestra comunidad. En tal sentido, se destacó la necesidad de considerar esta tradicional fiesta criolla como un compromiso con nuestras tradiciones y nuestra sociedad, reiterando que todo esto que ocurre durante la semana es el resultado de más de once meses de trabajo intenso, año tras año, de un grupo de Leones que trabaja sin fines de lucro por devolver a la sociedad lo que tanto nos da y que reúne a sectores de la sociedad que necesitan de este espacio y estas actividades como una forma de mantener vivas las tradiciones.
Otro punto importante y que el Presidente conoce bien por su pasaje por el Ministerio de Ganadería durante el anterior mandato, tiene que ver con lo que ocurre más allá de esta semana criolla con el Parque y la necesidad de revalorizar el mismo, controlar la seguridad y la búsqueda de empresas u organizaciones que estén dispuestos a invertir y mejorar el entorno con proyectos de interés.
Finalizada la reunión se encontraban presentes los medios de comunicación quienes buscaron declaraciones del Presidente. Le consultaron que lo había motivado a venir sorpresivamente a lo cual respondió … "vine a ver a unos amigos…", haciendo alusión a la Comisión Organizadora conformada por los Clubes de Leones Shangrilá y Parque Roosevelt.
Sin lugar a dudas fue una jornada muy especial para todos los que trabajan y quienes participaron de este gran día. La emoción se extendió durante todo el día, continuando luego durante el espectáculo folklórico, evocando y recordando este gran gesto que ha tenido nuestro Presidente con esta tradicional Fiesta Criolla y con quienes dedican mucho tiempo para lograr esto.